Importancia y actividades para fomentar la creatividad infantil

Una de las tantas preocupaciones como madres o padres es cómo participar en el proceso de desarrollo del potencial de nuestros hijos y que nuestro ejercicio vaya en sentido de favorecer las capacidades naturales en las áreas cognitivas en las que se destacan. Queremos que se adapten a un mundo de constante transformación para que con ello, el transito por las restantes etapas de la vida puedan hacerlo con entusiasmo, satisfacción y serenidad en igual medida.

Con ese objeto hemos buscado como podemos aportar al desarrollo de habilidades útiles en ese sentido y hemos encontrado, después de recibir múltiples recomendaciones de psicólogos o pedagogos, que estimular la creatividad es uno de los factores claves en los que convergen todos ellos. Destacamos por tanto a continuación, extractos de la información que la Dra. Dorothy Einon, quien siendo PhD de la New Hall Alumni de la University of Cambridge y coordinando investigaciones para la University College London, ha publicado en múltiples textos sobre temas relacionados con la crianza, el desarrollo o el comportamiento:

Porque creatividad ?

La creatividad está definida como la capacidad para la creación, como aquella habilidad que permite abordar las actividades de una forma diferente a la tradicional. Las personas que poseen esta habilidad enfocan las cosas de maneras originales y pueden incorporar esta capacidad como atributo de cualquier otra función.

Las situaciones que deben abordarse mediante un razonamiento convergente y con una solución única cada ves son menos, y lo cambiante de la sociedad actual (y posiblemente la futura), involucrará mayores opciones para atender las circunstancias, haciendo requerido un tipo de pensamiento denominado divergente que implica hallar soluciones nuevas y creativas.

Las primeras comunicaciones de los niños se producen mediante acciones y por tanto construyen una forma de pensamiento mediante movimientos e imágenes en lugar de palabras, con lo que cuando van creciendo sus juegos se convierten en maneras de contar historias y demostrar sus intenciones, ambiente en el que la creatividad se inserta como elemento decisivo, tanto para el relato de situaciones vividas como para la proyección de condiciones buscadas.

 

Porqué estimular la creatividad?

Los niños tienen la curiosidad y la confianza necesaria para probar cosas nuevas, no les cohíbe ni les asusta cometer errores y éstas son precisamente características de las personas creativas; cualidad que tiene impacto directo en la mejora en las facultades adaptativas y esto a su vez, se considera indispensable en las etapas posteriores de la vida.

La mayoría de las chicas nacen con muchas más capacidades innatas de las que llegarán a desarrollar por unas razones u otras, y podemos como padres, aportar herramientas que permitan identificarlas y motivar su auge, puesto que somos quienes conocemos mejor a nuestros hijos y les impactamos directamente con nuestras acciones.

Los talentos naturales de los niños van tomando forma con la experiencia, se les puede proporcionar un entorno adecuado, podemos enseñarles, explicarles, elogiarles, demostrarles o corregirles, pero solamente el desarrollo de la experiencia por si misma les permitirá incorporar conocimientos para su resolución creativa, ellos aprenden cosas haciéndolas y probándose en diversas situaciones.

 

Confianza para la creatividad?

El grado de autoestima en los niños pequeños varía en función de las situaciones en las que están inmersos, se acentúa haciendo aquello en lo que creen que son buenos y disminuye si les es necesario hacer aquello para lo que creen que no, guardando entonces relación directa con el entorno en que se desarrollen y con los cuidadores que hacen parte de él.

Los chicos con un alto grado de autoestima son menos conformistas y más creativos, por lo que si alentamos la creatividad en nuestros hijos no solamente les hacemos sentir mejor consigo mismos, sino que aumentamos sus posibilidades de éxito, entendido ésto último en la complacencia con la propia vida.

Si bien circunstancias particulares como la identidad de género, el orden de nacimiento, los talentos naturales y las capacidades diferentes determinan conductas humanas, cualquiera situación es buena para aplicar habilidades creativas que aumenten su confianza, fomenten la creatividad y fortalezcan sus relaciones.

 

 

Equilibrar creatividad, orden y método?

Para ser un músico creativo es preciso tanto habilidad innata como competencias musicales, igual con las artes o las ciencias si el objeto es ser capaz de crear; el equilibrio entre lo uno y lo otro es la fórmula, siendo el lenguaje creativo quien puede abrir las puertas de otras innumerables capacidades que pueden, y deben, ser estimuladas para su floración.

Los niños necesitan por tanto para ser creativos, en igual medida la estructura metódica y la oportunidad para expresarla de manera imaginativa. Hay unos que son expresivos por naturaleza y requieren de práctica que las permitan definir un método, mientras que otros desarrollan estructuras naturalmente y lo que puede ser motivado es la habilidad creativa.

El equilibrio es la medida de éxito y aplica para la felicidad, la salud y por supuesto para la creatividad de nuestros chicos. Ninguna medida es exacta en cuanto a esto, pero el entorno situacional y el conocimiento de sus capacidades, permitirá dar una horizonte armónico de los aspectos a motivar.

 

 

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Actividades para la estimulación de la creatividad en las niñas y los niños

Si bien las actividades pueden ser infinitas, les agrupamos en los apartados siguientes.

 

Juegos de imaginación:

Estas actividades son de las que se pueden realizar en cualquier sitio, solamente requieren de tiempo y animan a los chicos a pensar creativamente, implican la motivación directa de habilidades cognitivas y dentro de ellos destacamos:

• Imaginar como puede pasar el día un animal, que actividades realiza, a que lugares va o con quienes interactúa.
• Inventar que las cosas o las plantas pueden hablar y decirnos que piensan o sienten, o contarnos lo que han visto o han oído.
• Hacer listas ya sea de colores, países, personas, planetas, personajes, números, libros o cualquiera relacionada con el momento.
• Inventar un mundo al revés en el que los hijos son los padres o los animales son los que dirigen el mundo o en el que está cubierto de agua la tierra, por ejemplo.
• Divertirse con juegos de preguntas abiertas que requieran respuestas imaginativas, sean estos interrogantes del entorno inmediato, de sucesos pasados o de proyecciones de futuro.
• Buscar conexiones entre situaciones, personas o cosas que a simple vista no la tienen, tal como una estrella y un bolsillo, un personaje y una cuerda, una canción y un color; de manera que el proceso de búsqueda de la conexión involucre imaginación.

 

Dibujos, manualidades y proyectos:

En estas actividades se involucra el desarrollo de habilidades de coordinación visiomotriz y requieren poner a disposición de los chicos materiales diversos, que pueden múltiples según los elementos disponibles, y de las que invitamos a:

• Identificar y categorizar materiales diferentes ya sean sus propias cosas o de los recursos del hogar o del sitio donde se encuentren: juguetes, libros, hojas, cuerdas, cuencos, entre otros tantos
• Dibujos creativos o estructurados en los que las niñas y los niños recreen lo que se les antoje sin limitaciones de tamaño o color
• Combinaciones de materiales creativos que permitan a los chicos texturizar, colorear, trazar, doblar, cortar o pegar componentes diversos
• Creación de adornos con cuerdas, lanas, telas o hilos de los que se dispongan, o decorar ropa, acompañando si quieren de abalorios o bisutería
• Construcciones con masa, pasta o arcilla que involucren el modelado de las piezas y su decoración a gusto con el entorno para el cual los crean.
• Motivarles la arquitectura con materiales reciclados incitándoles a inventar sus propios juegos o a complementar los ambientes de sus juguetes con ello.

 

 

Actividades con movimiento físico:

En estas actividades el protagonista es el movimiento de las diversas partes del cuerpo y tienen como objeto de desarrollar habilidades motrices, pudiendo ser:

• Moverse como un animal de su elección o como una manada de ellos si es en grupo, intentando que copien su posición, desplazamiento o actitudes.
• Actividades que impliquen superación de obstáculos físicos como escapar de animales, recorrer caminos con obstrucciones o simular saltar de edificios.
• Representarse como un deportista de su afición para con ello copiar su entrenamiento, sistema de juego o forma de celebración.
• Actividades colaborativas que impliquen contacto, soporte o acción con otras personas: sostener como un árbol, chocar las manos o hacer una torre.
• Escuchar diferentes estilos musicales y motivar el movimiento al ritmo melódico, incitando al baile con libertad de movimiento.
• Juegos que impliquen arrastre de piezas, empuje de elementos, alcanzar materiales o buscar objetos, alternando ubicaciones e instrucciones.

 

Representaciones y fantasía:

Con esas actividades el objeto es motivar las experiencias creativas envolventes que combinen personificación, proceso, entorno y creación, de las que mencionamos algunas como:

• Disfrutar de esconderse en sitios para con ello imaginen mundos alternos y fantasean durante esos instantes que se transportan o crean otras sociedades.
• Crear un mundo propio en el que se interpreten como quieren ser o que hagan que sus muñecos interpreten los roles que desean en él: crear una casa de muñecas, montar un campamento, imaginarse en el espacio.
• Recreación de cuentos, mitos, leyendas, series o películas que les sean de su agrado, integrando el ambiente, los personajes y la narrativa que en ellos se desarrollan.
• Utilizar el concepto de magia como elemento transformador de cosas, seres, animales o situaciones, imaginando que pueden, a través de acciones propias, cambiar su estado, lugar o composición.
• Recrear roles o funciones que llamen su atención siendo bomberos, policías, cocineros u otras que físicamente impliquen trajearse, alterar su entorno, seguir pasos y realizar una creación.

 

 

La creatividad en los niños es un factor desencante de actitudes y habilidades, que puede hacerles mejores y más felices 🙂